Análisis - Disaster: Day of Crisis (Wii)

Qué mejor manera de empezar el año 2012 que con el análisis de un juego como Disaster: Day of Crisis :D


Disaster: Day of Crisis (Wii)
Finalizado 3 veces y en la dificultad más alta.

El propio nombre del juego y su temática coinciden con la forma en la que se desarrolló este juego; tuvo varios retrasos y trascendentales cambios en su jugabilidad a lo largo de su desarrollo, algo que se refleja en un acabado del juego un poco irregular.

Respira hondo y no te exijas tanto.

El juego sigue una historia de gigantescos desastres naturales y terroristas que quieren aprovecharse del desconcierto generado, dentro de lo cual se ve involucrado el protagonista, Raymond Bryce, que antaño fue miembro de un destacamento de rescate de élite. Al margen de la inverosimilitud de la ingente cantidad de desastres que se producen y de que un solo hombre pueda enfrentarse cara a cara con un grupo de terroristas, la historia es bastante interesante, tiene momentos espectaculares y otros emotivos, aporta mucho conocimiento didáctico sobre catástrofes y además tiene un buen final.

Cuando Raymond sale corriendo debemos hacer el típico agitamiento de mandos.

Por supuesto, Raymond es un personaje muy destacable. No es especialmente mordaz en sus comentarios ni se vale de florituras para parecer mas cool, pero siendo un buenazo como es, es genial ver como resuelve cada situación por muy desesperada que parezca.

Jugablemente es muy variado, cada fase tiene una jugabilidad concreta que suele ser bastante sencilla, aunque más difícil cuanto más avanzamos. Normalmente controlamos a Bryce con una cámara en 3ª persona mientras vamos explorando un escenario más o menos lineal, salvaguardandonos de los peligros, rescatando supervivientes y recogiendo items.
En el momento en el que llegamos a puntos concretos del escenario la cámara cambia a 1ª persona y la jugabilidad cambia a un estilo de shooter on-rails. También hay trepidantes fases de conducción y cuando rescatamos supervivientes hay que hacer diferentes minijuegos o resolver sencillos puzzles.

Hay numerosas fases de estilo shooter on-rails, con un toque bastante particular.

Por supuesto, también hay algunos enemigos finales bastante duros contra los que tenemos que adoptar diferentes estrategias.
Y a medida que avanzamos en el juego y conseguimos puntos podemos mejorar las aptitudes de Raymond y comprar nuevas armas a nuestro gusto.

Om nom nom nom.

Todo ello se controla con el Wiimote y el nunchuk, haciendo uso del puntero en las fases de disparos y moviendo los mandos para diferentes acciones dentro de cada tipo de fase y especialmente en los minijuegos de rescate.
Además de lo dicho, disponemos de una barra de vida, otra de resistencia, otros tipos de indicadores con los que debemos de ir con cuidado y debemos ir recogiendo comida y munición, haciendo el juego más complejo de lo que en un principio podría parecer. Por ejemplo, si pasamos por encima de un fuego luego tendremos que sofocarnos las llamas para no sufrir más daño, y si pasamos por una zona con el aire contaminado, al salir tendremos que recuperar aire para limpiarnos los pulmones.

El control por movimientos es recurrente a la hora de rescatar supervivientes.

Todo esto hace de Disaster un juego bastante ameno, original y espectacular en muchos momentos, pero como bien afirma el dicho, «aprendiz de todo, maestro de nada», ninguna de sus fases es especialmente destacable en cuanto a innovación, calidad o diversión.

Gráficamente es bastante decente, aunque no siempre mantiene el nivel y tiene un estilo de gráficos realistas que no quedan excesivamente bien en Wii. El movimiento del personaje es poco realista, algo que desentona con el estilo del juego. Por otro lado, las CGI que aparecen en varios momentos del juego son de una grandísima calidad.

Algunas fases de conducción son realmente espectaculares. ¡Cuidado con esa concha azul!

En el aspecto sonoro cumple, aunque algunos efectos de sonido son un poco cutres.
Tiene un doblaje muy bueno en inglés y todos los textos están traducidos al castellano.

Tiene una duración media, de unas 12 horas y es bastante rejugable por sus diferentes niveles de dificultad, el coleccionismo de items y la conservación de las aptitudes de Raymond y sus armas. Es un juego exigente en algunos momentos, más en el modo más difícil, aunque se hace más fácil al mejorar las aptitudes de Raymond y sus armas.

Poco después de esta escena tenemos que matar a un oso que se quiere merendar a la niña. Un claro homenaje a Pedobear xD

Conclusión:
Bastante ameno, divertido y original en su conjunto. Todos los tipos de jugabilidades cumplen perfectamente, aunque ninguna es especialmente destacable al comprarlo con otros juegos del género. El control está perfectamente adaptado al Wiimote y utiliza la gran mayoría de sus funcionalidades. La historia es bastante inverosímil pero interesante y tiene una buena conclusión. En general es un juego que me ha agradado a pesar de que en algunos aspectos es poco realista o tiene pinta a cutre.


NOTA FINAL: 7 de 10. Buen juego.


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